En la carta del Diez de Oros, hay un anciano sentado en un arco que conduce a una gran finca. Parece que es el cabeza de familia, porque está rodeado de seres queridos más jóvenes. Lleva una túnica decorada con lunas y vides, lo que indica la unión del espíritu y la materia. Tiene a su familia y perros con él. Hay una pareja feliz delante de él, presumiblemente sus hijos y un niño juguetón detrás de esta pareja, su nieto. El niño tiende la mano juguetonamente para acariciar al perro.
El Diez de Oros habla de la plenitud y la satisfacción. La carta muestra que todo en lo que has puesto tu esfuerzo durante mucho tiempo dará sus frutos en el futuro. Esto sugiere que todo saldrá bien al final – porque siempre has mantenido la visión a largo plazo, eligiendo no tomar atajos.
Tu legado se mantendrá por mucho tiempo.
Esto es un alivio, ya que el camino para llegar hasta aquí ha estado lleno de contratiempos y desafíos, haciendo que este punto del viaje sea aún más dulce.
En la carta, el anciano puede sentarse y relajarse mientras observa la vida de sus hijos y nietos. La satisfacción que deriva de sus logros está entretejida en la felicidad de sus hijos. El significado de El Diez de Oros también se relaciona con la felicidad que experimentas porque has plantado muchas semillas y has participado en las vidas de otros, particularmente de miembros de tu familia y parientes. Señala la importancia de estas personas en tu vida.
El simbolismo de El Diez de Oros está arraigado tanto en el éxito financiero como en la estabilidad. Muestra afluencia y ausencia de lucha financiera. También te implora que tomes decisiones que no sólo tendrán resultados positivos en el presente sino también a largo plazo. Las decisiones que tomes deben producir resultados positivos que duren para las generaciones venideras, llegando también a tu descendencia.
El Diez de Oros en posición vertical
Esta tarjeta nos habla del pináculo de la prosperidad: una casa de familia, un negocio que se puede pasar a los hijos, armonío, relajación, la plenitud ansiada de la madurez…
Puede indicar que alguien está próximo a la jubilación, buenas relaciones con los parientes ancianos, una genealogía fuerte y sana, o puede indicar la llegada de herencias – grandes o pequeñas.
Puede tratar sobre antigüedades y otros trastos viejos, o cosas valiosas que pasaron de generación en generación.
En un nivel más simple, la carta puede indicar que están pasando cosas más superfluas como limpieza de un armario lleno de ropa vieja y desgastada que ya no usamos, y que debemos darle a las personas sin hogar, la entrega de esa colección de peluches para un hospital de niños o la limpieza de los libros de las estanterías rebosantes y su entrega a una biblioteca local.
Aunque similar a al Seis de Oros, esta carta no se trata tanto de generosidad, ya que se refiere más de la utilización de la abundancia ( riqueza) para dejar un legado.
«Hay mucho que disfrutar», parece decirnos esta carta.
El Diez de Oros en posición invertida
El significado invertido de El Diez de Oros puede ser una advertencia sobre tu futuro estado financiero. Podría señalar problemas e inconvenientes más adelante en la vida, aunque actualmente no sean un problema. También podría mostrar la naturaleza defectuosa de una inversión en la que has invertido mucho tiempo y esfuerzo.
En general, esta carta invertida parece indicar que estás apostando demasiado a tu éxito a corto plazo, mientras que dañas tu potencial a largo plazo. Da un paso atrás y evalúa si tus decisiones en este momento conducirán a más daños en el futuro.
El Diez de Oros en sentido inverso también puede hablarnos de las relaciones. Podría mostrar el final repentino de un matrimonio que ha estado funcionando con fuerza durante años. También podría mostrar que has pasado por una mala racha, pero todavía hay esperanza de que las cosas vuelvan a la normalidad.
Para aquellos que son solteros, podría señalar el hecho de que algunas de las relaciones han sido excelentes para divertirse a corto plazo, pero carecen de la sustancia para conducir a un compromiso de por vida.