Este es un Hechizo para invocar espíritus y sirve para comunicarse con los espíritus de familiares o amigos, uno puede dejarles mensajes o hasta comunicarse con ellos. Para ello usted necesitará emplear lo elementos que le describimos a continuación y seguir paso a paso nuestro tutorial.
Elementos a usar
- 2 cirios morados
- 2 cirios verdes
- 1 Piedra ametista morada, verde o Jade (en el centro del altar)
- Incienso sándalo y lavanda
- 1 Incienso Sandalo
- 1 corteza de sauce
- 1 Vela espiritual y
- 1 Campanita para el ritual
Procedimiento del Hechizo para invocar espíritus
Establézcase en un círculo triple. El conjuro de los espíritus siempre se hace en horas de oscuridad, no es necesario que sea en la medianoche, pero es preferible. Después de haber realizado el ritual primario, emita el incienso en tu quemador, coloque la vela espiritual en el centro del altar y diga:
«Espíritu de buena voluntad, te pido que ingreses
Al círculo exterior.
Al segundo círculo y
Al círculo interior.
Estoy protegido por este Pentagrama en mi pecho.
Que lleva el nombre de (del espíritu guía)
Te ordeno Espíritu, revelarme tu nombre terrenal!“.
Puede realizar una adivinación del Tarot con nueve cartas para el nombre del Espíritu, a menos que el Espíritu de respuestas de alguna otra manera. (Puede repetir este conjuro tres veces). Pregunte: ¿Tiene un mensaje para mí? haga preguntas al tarotista, relacionado con el espíritu que usted quiere contactarse. Trate con cuidado a estos Espíritus de amistad ya que lo llevarán a saber grandes misterios.
Durante su interrogatorio, observe la vela espiritual. Si vacila o sube y baja, o parpadea de manera desigual, en ese momento utilice el Tarot para ver si el Espíritu tiene un mensaje. Usted puede solicitar 3 preguntas. Luego de eso usted puede invocar a través del Espíritu diciendo:
“(Nombre), Buen Espíritu,
Tú has respondido con diligencia a mis preguntas y te doy las gracias a ti. Por la presente te doy permiso para partir. Espíritu estate dispuesto a volver la próxima vez en el conjuro. (Activa el sonido de tu campana), te dejo ir. Apartaos, apartaos. ¡Vete!”.
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